La empresa Lácteos Vidal fue embargada por 170 millones de pesos tras ignorar una orden judicial que exigía la reincorporación de trabajadores despedidos. El caso, respaldado públicamente por Florencia Arietto, expone una creciente espiral judicial y anticipa nuevas sanciones económicas.
Lácteos Vidal, la firma láctea que en los últimos meses se convirtió en emblema de la confrontación sindical y judicial bajo el asesoramiento público de la abogada Florencia Arietto dentro del Movimiento Empresarial Antibloqueos que supo auspiciar Juntos por el Cambio, fue embargada por 170 millones de pesos tras incumplir reiteradamente una orden judicial que la obligaba a reincorporar a trabajadores despedidos de forma injustificada.
A fines de febrero de 2023, la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo confirmó el fallo dictado por el juez en primera instancia que ordenaba reincorporar a los 29 trabajadores despedidos por Lácteos Vidal. Los dueños son miembros de la acaudalada familia de empresarios Bada Vázquez que, asesorados por abogados del Movimiento Empresarial Antibloqueos, se negaron a cumplir el fallo. La justicia había establecido el pago de astreintes, una sanción que sirve para hacer cumplir las decisiones judiciales y ahora embargó sus cuentas.
Este embargo —el primero en ejecutarse— corresponde a los astreintes, sanciones económicas impuestas por el juez del caso ante la negativa prolongada de la empresa a acatar su resolución. Estas multas coercitivas se acumulan por cada día de incumplimiento, y en este caso, han escalado hasta una cifra millonaria.
Lejos de ser un caso cerrado, fuentes judiciales señalaron que ya se preparan nuevos embargos, incluso por cifras superiores, sin contar otras causas legales aún pendientes de resolución que enfrenta la firma.
El conflicto entre Lácteos Vidal y sus extrabajadores ha generado un fuerte revuelo político y mediático, en gran parte por el rol de Arietto, exasesora de seguridad y actual figura mediática, quien respaldó a la empresa en su enfrentamiento con el gremio y desestimó públicamente las decisiones judiciales. Este respaldo, sin embargo, no ha impedido que la justicia avance con medidas concretas.
La utilización de astreintes representa una herramienta legal clave para garantizar el respeto a las decisiones judiciales, especialmente cuando una parte —como en este caso— demuestra resistencia sistemática al cumplimiento de las normas. El monto del embargo refleja tanto la gravedad de la desobediencia como la duración del incumplimiento.
Mientras tanto, los trabajadores siguen reclamando su reincorporación y el cumplimiento efectivo de sus derechos laborales, en un conflicto que ya se ha convertido en un caso testigo sobre los límites del poder empresarial y la eficacia de la justicia laboral en la Argentina actual.
INFOGREMIALES
