El Sindicato Obrero de la Industria del Pescado reclama el pago completo de las indemnizaciones a 42 trabajadores despedidos. La caída de la actividad y la falta de respuestas empresariales agravan el escenario laboral.
La crisis que atraviesa la industria pesquera en el Puerto de Mar del Plata continúa dejando consecuencias laborales de alto impacto. Según denunció el Sindicato Obrero de la Industria del Pescado (Soip), unos 200 empleados dejaron de trabajar en las plantas del sector durante el último año y medio, en un contexto de paralización de la actividad, acuerdos de desvinculación forzada y despidos.
Uno de los casos más graves es el de la empresa Apolo Fish S.A., donde 42 trabajadores –entre envasadores, peones, plaquistas y camaristas– fueron despedidos y no han recibido las indemnizaciones correspondientes. La compañía ofrece pagar solo el 50% de lo que establece la ley, y en 18 cuotas que se extenderían hasta 2027. La propuesta fue rechazada por los empleados, quienes exigen el pago completo y en condiciones dignas.
Soledad Juárez, delegada gremial del Soip, informó que el pasado martes se llevó a cabo una audiencia en el Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires, pero no se alcanzó ningún acuerdo. “Nos ofrecen una suma parcial y cuotas interminables. Es una tomada de pelo. Estamos en el aire, nadie da la cara”, expresó en diálogo con 0223.

Los trabajadores rechazaron también un pago adicional de $200.000 tras haber recibido una entrega previa de $350.000, montos que consideran insuficientes frente al daño económico sufrido.
Además del Soip, otros ocho empleados representados por el Sindicato de Empleados de Comercio (SEC) también reclaman el pago justo de sus indemnizaciones. En total, los 42 despedidos siguen a la espera de una respuesta seria por parte de la empresa.
Juárez denunció que uno de los actuales responsables de Apolo Fish asumió en enero, pero “desconoce toda la situación”. Y señaló que otras empresas del puerto enfrentan riesgos similares, con atrasos salariales y planta paralizada. “Desde el cambio de gobierno, la pesca no rinde y muchas firmas no pueden sostener la actividad”, alertó.
En este contexto, muchos trabajadores sobreviven con changas esporádicas y la ayuda de sus familias. “Nos arreglamos como podemos para poner un plato de comida en la mesa”, concluyó la delegada.
INFOGREMIALES