La Asociación del Personal de los Organismos de Control (APOC) reclamó la cobertura urgente de vacantes en la Auditoría General de la Nación (AGN) y denunció la falta de presupuesto. Legisladores reconocieron la parálisis del organismo y prometieron impulsar las designaciones.
Con la consigna “La AGN es un barco a la deriva”, la Asociación del Personal de los Organismos de Control (APOC) encabezó este jueves 29 de mayo una movilización al Congreso de la Nación para exigir la cobertura inmediata de las vacantes en la Auditoría General de la Nación (AGN). La protesta buscó visibilizar el deterioro institucional del principal órgano de control técnico del Estado, afectado por la falta de presupuesto y acefalía en su conducción.
El secretario general de APOC, Hugo Quintana, junto al adjunto Miguel Giménez, entregaron un pedido formal a la Comisión Mixta Revisora de Cuentas y mantuvieron encuentros con legisladores. “La AGN es el organismo con antonomasia que dice qué está bien y qué está mal”, señaló Quintana, y advirtió: “Hace dos años que no tenemos presupuesto y hace 25 años que no tenemos defensor del pueblo. Estamos en un punto crítico”.
La situación de acefalía en la AGN, cuya función es auditar al Estado nacional en nombre del Congreso, viene siendo denunciada por trabajadores y especialistas desde hace meses. APOC denuncia que la falta de designaciones no solo vulnera el mandato constitucional de control, sino que también genera incertidumbre en un plantel técnico altamente calificado.

Durante la jornada, el diputado nacional Miguel Ángel Pichetto reconoció la preocupación del Congreso por la paralización del organismo. “Desde la comisión bicameral ya notificamos a los presidentes de ambas cámaras para que avancen en los nombramientos”, afirmó. En la misma línea, el diputado Álvaro González destacó la gravedad de la situación: “Estamos en un punto límite. Los propios trabajadores vienen al Congreso a pedir que se nombre a sus autoridades. Es una deuda que el Poder Legislativo tiene que saldar”.
Quintana también hizo hincapié en el impacto institucional del vaciamiento: “La distancia entre la política y la sociedad se va a achicar si las instituciones son transparentes y rinden cuentas. Para eso está la AGN, y por eso su funcionamiento no puede estar en suspenso”.
Desde APOC volvieron a reclamar que el Congreso cumpla con su responsabilidad constitucional y restituya el pleno funcionamiento del organismo. “Sin control no hay democracia sólida, y sin auditoría, no hay transparencia ni confianza en las instituciones”, concluyeron.
La Auditoría General de la Nación es un órgano técnico del Congreso encargado de auditar la administración pública nacional. Sus informes son fundamentales para garantizar el control del gasto y la legalidad de los actos del Estado. En el actual contexto de ajuste presupuestario y tensión institucional, su debilitamiento representa un riesgo crítico para la calidad democrática.
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