Gustavo Mazzaferro, secretario general de Luz y Fuerza de Coronel Suárez, fue atacado con una escopeta de caño recortado en la puerta de su casa. El agresor, Ariel Rodríguez, le disparó a la cabeza pero la bala sólo le rozó el cráneo, luego lo golpeó con la culata del arma mientras lo amenazaba. Terminó detenido y el sindicalista sigue internado aunque fuera de peligro.
Un brutal atentado conmocionó a la ciudad de Punta Alta luego de que Gustavo Mazzaferro, reconocido dirigente sindical de la CGT Regional Bahía Blanca y funcionario público, fuera baleado y golpeado salvajemente en la puerta de la vivienda de un familiar. El ataque, presuntamente vinculado al despido del atacante, dejó al también líder de Luz y Fuerza de Coronel Suárez con un coágulo en la cabeza y múltiples heridas, por lo que permanece hospitalizado en el Hospital Matera.
Según informaron medios locales, el agresor, identificado como Ariel Rodríguez de 49 años, llegó hasta la casa en la que se encontraba Mazzaferro, tocó el timbre y, sin mediar palabra, le disparó con una escopeta recortada. El proyectil rozó su cabeza, pero Rodríguez no se detuvo: continuó la agresión propinándole culatazos en el rostro y el cuerpo, mientras lo amenazaba de muerte.
La casualidad quiso que el ataque ocurriera a media cuadra de donde se encontraba un oficial de policía que estaba de franco, quien presenció parte de la agresión y logró la inmediata detención del atacante.
Mazzaferro, quien además de su rol gremial se desempeña como director del Ente Zona Franca y del Consorcio de Gestión de Puerto Rosales, fue trasladado de urgencia a un hospital de Punta Alta y luego derivado al Hospital Matera, donde sigue internado.
Desde la Secretaría de Interior de la CGT nacional emitieron un comunicado solidarizándose con Mazzaferro tras el brutal ataque y aclarando que, pese a versiones erróneas, no es secretario de la CGT Punta Alta, ya que esa ciudad depende de la Regional Bahía Blanca.
El detenido, Ariel Rodríguez, ya había amenazado a Mazzaferro en 2023 con un arma de fuego, tras ser despedido de una cooperativa eléctrica. En aquel momento fue detenido y procesado por portar un arma con la numeración limada.
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