Los trabajadores de ILVA, que mantienen un acampe tras los 300 despidos en Pilar, realizaron este lunes una protesta frente al show room de la empresa en Palermo, mientras denuncian reemplazos con personal precarizado y salarios adeudados.
En medio de la crisis por los 300 despidos materializados la semana anterior y mientras los trabajadores de la empresa ILVA mantienen su plan de lucha, la fábrica de porcellanato lanzó una amplia búsqueda laboral para cubrir con empleados más “baratos” los puestos de los recientemente cesanteados.
Este lunes, mientras los operarios marchaban desde la planta hasta el consorcio del Parque Industrial Pilar, la firma activaba una convocatoria en sitios especializados como opcionempleo.com.ar. Allí se ofrecen vacantes para supervisor de producción, representante comercial, operarios y supervisores eléctricos, entre otros, con requisitos de experiencia en hornos y manejo de clarks.
“Es una bofetada, están ofreciendo nuestros puestos de trabajo”, resumió a El Diario de Pilar Marcelo Barrionuevo, delegado y empleado de la empresa desde hace 23 años.
Los despedidos advirtieron que quienes ingresen a la compañía lo harán “en condiciones diferentes, sin los derechos y conquistas alcanzadas a través de los años”. Hasta hace una semana, los trabajadores contaban con la llamada “antigüedad ILVA”, servicio de comedor y transporte, y tickets canasta incluidos en el recibo de sueldo. También desaparece la modalidad laboral “4×4” (cuatro días de trabajo y cuatro de descanso) y el salario ofrecido rondaría los 650 mil pesos, una cifra que los delegados denuncian como “muy por debajo de la línea de pobreza”.
“Somos 300 despedidos, pero hay mucha más gente detrás: hijos, esposas, padres, parejas… Cerraron todo y nos dejaron fuera como perros”, expresó Barrionuevo, al tiempo que alertó que “los nuevos van a entrar en condiciones precarias”.
Ahora bien, mientras los despedidos llevan once días consecutivos de acampe, este martes sumaron una nueva medida: realizaron una protesta frente al show room de cerámica ILVA en el coqueto barrio porteño de Palermo. Allí reclamaron la reincorporación de los cesanteados, el pago total de salarios adeudados y denunciaron que la búsqueda de nuevos empleados “es un intento de reemplazo a menor costo”.
El delegado también había denunciado que aún “no les pagaron a todos la quincena ni el salario mensual. Recién cuando el tema salió en los medios empezaron a depositar, pero algunos compañeros recibieron $125, una cargada”. Y remarcó: “Somos pacíficos; si no nos quieren más, que nos paguen el 100%”.
Un dato no menor es que Patricio Colombo Mosetti, directivo de ILVA, es también titular del consorcio y de la Cámara Empresaria del Parque Industrial Pilar (CEPIP).
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