El Fiscal General Juan Pablo Fernández salió al cruce de las declaraciones de la diputada Provincial de Frente Renovador María Marta Corrado, involucrada recientemente en un presunto caso de estafa en una herencia y la “invitó” a abandonar las maniobras políticas y responder ante la justicia.
fuente : la brujula 24
La semana pasada, luego de que la justicia allanara su casa en busca de una colección de armas que su ex marido le había cedido como parte de la herencia de su hermano asesinado, Corrado criticó duramente el accionar de la justicia y tildó el procedimiento como una maniobra con un claro interés político por desprestigiarla.
Visiblemente indignada por la situación Corrado arremetió contra el joven Fiscal de Tres Arroyos y la justicia en general y en medio de su ataque calificó de temerario a Fernández que no tardó en responderle con mayor dureza.
“La escuché a la doctora Corrado calificarme de ‘temerario’. Me pregunto, ¿temerario yo? Yo me he cansado de escuchar a algunos imputados que me vinculaban mediáticamente al Dámaso Larraburu para tratar de justificar su posición. Ahora, ¿justo, la doctora Corrado va a decir eso?”, expresó Fernández, en diálogo con el programa “Vos sos Voz”, que se emite por LA BRÚJULA 24 FM 93.1.
“Ella tiene que entender que en Bahía Blanca no hay impunidad para nadie, ni para los aliados de Larraburu ni para los que no lo son. Tiene que empezar a ser más sensata y responder donde tiene que responder y de la forma en que debe hacerlo”.
“Yo no tengo nada que ver con su causa. Es un juez de garantías quien dispuso el allanamiento y ha determinado una medida de cohesión real, vinculada a una causa dónde se investiga el fraude de una herencia”, aclaró el Fiscal General.
“Corrado tiene que dejarse de hacer estas maniobras y responder como corresponde sin tratar de embarrar la cancha”, sentenció.
Para Fernández, Corrado trabajaba poco y dejó la UFI N°14 en un estado “calamitoso”
Más allá de esta causa en particular el Fiscal General también cuestionó la capacidad laboral María Marta Corrado. Primero la acusó de haber trabajado poco cuando ocupaba la fiscalía de delitos sexuales y de dejar muchas causas sin atender, y luego recordó algunos aspectos poco lúcidos de su pasado.
“La doctora Corrado había afrontado una suspensión de juicio a prueba por un delito de amenaza. Probablemente por eso, ella nunca fue propuesta como instructora judicial”, mencionó Fernández.
“Cuando yo llegué a la fiscalía General, me pareció que era injusto no darle una oportunidad y yo la propuse como Instructora Judicial. Al poquito tiempo es designada Fiscal y la asigno a una UFI importantísima de delitos sexuales, donde son hechos graves por los bienes que afecta y con muy pocas causas, alrededor de 30 por mes”.
“Luego, cuando renuncia a fines de junio, me encargo de hablar personalmente en la procuración para agilizar su licencia y que pueda dedicarse de lleno a la política”. “Sin embargo, a través de unadenuncia de un particular llamado López Canale, se había presentado un pronto despacho, lo que es algo grave. Entonces, pedí la causa y comprobé esta situación”.
“Ya la doctora Corrado no estaba, pero pedí una reunión urgente a los instructores para que me den un aexplicación, aunque no lograron hacerlo. Pedí un informe y fue insuficiente. Y cuando empecé a investigar, encontré cosas inesperadas. Atrasos tremendos, decenas de causas de hechos graves, violaciones, abusos sexuales, abusos infantiles, temas de trata de personas, que no habían sido despachados en 1 año y medio”.
“A partir de ahí, tomé dos medidas. En primer lugar, por el estado de emergencia de la UFI, extiendo el horario de los instructores judiciales hasta las 5 de la tarde. Y dispuse, además, un sumario administrativo. Además, me enteré, en el marco de estas circunstancias, que una de las instructoras había presentado una denuncia por acoso laboral que había sido desestimada”.
“A partir de allí probablemente la doctora Corrado haya visto que eso era algo en contra de ella. Pero la realidad es que no es algo en contra de ella, sino que es la realidad del estado en que dejó a la UFI No 14. Uno le dedica mucho tiempo y mucho esfuerzo a esto; y mientras la doctora se dedicaba al footing a las 2 de la tarde uno seguía trabajando hasta las 5”.
“El servicio de Justicia es eso, un servicio. Esto no es tener un laburito hasta el mediodía, para ganar bien y que nadie nos moleste demasiado. Nosotros debemos trabajar y cumplir un rol por el bien de la sociedad”.
“Mi función es exigir, y que se cumpla, nada más y nada menos que con aquellos que nos pagan el sueldo. Por eso uno trabaja, se esfuerza, paga los costos. Y creo que estas cosas suceden a través de un desagradecimiento, afecta en el punto de vista de las miserias humanas de cómo se embarra la cancha”.
“Y si no les gustan mis formas, que junten el número necesario y me saquen del cargo. Pero acá no va a haber beneficios para nadie. Ni para los que están del lado del larraburismo, ni para los que no”