El Gobierno sigue con su campaña de eliminar al kirchnerismo de los edificios públicos y mandó a tapar un mural en Correo Argentino

El Gobierno ya había hecho lo mismo en el Ministerio de Capital Humano. Ahora en Correo Argentino. La batalla cultura de Javier Milei incluye la eliminación de todo rastro de peronismo y kirchnerismo en edificios públicos.

 

 

Como había sucedido el viernes en las instalaciones del Ministerio de Capital Humano, el Gobierno Nacional ahora mandó a tapar un mural con la imagen de Néstor Kirchner en uno de los edificios de Correo Argentino.

«Los edificios públicos son de todos los argentinos. No corresponde que en ellos haya propaganda política», lo promocionó en las redes sociales el Vicejefe de Gabinete Lisandro Catalán. Lo curioso es que Catalán fue funcionario en el Gobierno de Alberto Fernández hasta que terminó y parecía pensar más bien lo contrario.

Según el tucumano Catalán, «estamos removiendo pintadas y símbolos partidarios en todos los edificios públicos, para garantizar la libertad de expresión y de pensamiento».

El plan de Javier Milei y de su batalla cultural tuvo el viernes un capítulo destacado. El mismo día ordenó que se retire el busto del expresidente Néstor Kirchner de las oficinas de la ANSES ubicadas en la calle Paseo Colón, en el microcentro de la ciudad de Buenos Aires y más tarde más a borrar toda la simbología peronista, kirchnerista o sindical de los edificios de la cartera de Sandra Pettovello.

El Gobierno sigue con su campaña de eliminar al kirchnerismo de los edificios públicos y mandó a tapar un mural en Correo Argentino

Desde el Secasfpi, gremio mayoritario que nuclea a los trabajadores de la ANSES catalogaron al Gobierno como «la nueva Revolución Libertadora» en referencia con la recordada Dictadura Militar del país.

«Esta medida cargada de simbolismo autoritario no es un hecho aislado: es parte de un proceso sistemático de desmantelamiento de la memoria histórica, los derechos sociales y las conquistas populares de los últimos años», plantearon.

Además rememoraron que la «libertad» en el contexto de la Revolución Libertadora sirvió para justificar «el odio de clase y la imposición de un modelo económico que benefició a unos pocos en detrimento del pueblo trabajador».

 

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