Bariloche tuvo una elección compleja y con resultado sorpresivo. El sindicalista Walter Cortés, que lleva 30 años al frente de la local Asociación de Empleados de Comercio, será el nuevo intendente de la comuna más poblada de Río Negro con apenas el 19,6 por ciento de los votos. Cortés, con su sello de Partido Unión y Libertad (PUL), superó a la actual gobernadora y candidata Arabela Carreras por cuatro puntos, en una elección con doce postulantes donde sólo votó el 61,2 por ciento de los más de cien mil empadronados y el voto en blanco fue la tercera fuerza con el 13,5 por ciento. “No soy un busca de la política, ni voy hacer negocios ni nada por el estilo”, dijo a PáginaI12 el sindicalista peronista de 60 años que cosechó con diez propuestas dirigidas a los sectores más postergados de la ciudad turística, cuyos barrios periféricos le aportaron el mayor caudal de votos para desplazar de la intendencia al oficialismo provincial de Juntos Somos Río Negro tras ocho años de gestión. “Voy a hacer un gobierno excelente porque voy a estar con el pueblo”, afirma.

“Les agradezco de corazón que me hayan acompañado, y les pido, por Dios, que lo sigan haciendo, que el día de mi asunción esté todo el pueblo, porque voy a ser el intendente de los humildes”, remarcó Cortés a los simpatizantes que se reunieron en local de partidario para celebrar la victoria. Allí, sus seguidores entonaron la Marcha Peronista que en los parlantes sonó con la tradicional versión de Hugo del Carril. Su sello, el PUL –parte de dispersa oferta del peronismo barilochense dividido en cuatro listas–, venció al oficialismo en una elección que también desplazó al quinto lugar a la versión local de Juntos por el Cambio.

–¿A qué atribuye la victoria?

–Primero que hay un gran desencanto con la clase política. Segundo, acá no se hace obra hace mucho tiempo, la gente vive muy mal, la conectividad de Bariloche está saturada donde hoy un turista desde el Llao Llao al centro tarda una hora porque no se hicieron las obras que hay que hacer. En el Alto de Bariloche también pasa lo mismo y uno de los problemas grandes de la ciudad es que no se ha descentralizado la administración. Hay que hacerlo y llevarla a las distintas delegaciones, para que la gente no venga a la ciudad, que tiene un esquema de hace 30 años atrás, que hoy tiene 160 mil habitantes y hace agua por todos lados.

–¿Y en lo personal?

–Donde ven que hay una persona que hace cosas, no importa de dónde sea y que le ayuden a resolver la vida. Y como yo en mi organización hice muchísimas cosas para la gente, he entregado terrenos, una pileta de natación climatizada, tenemos departamentos en Las Grutas.

–Habla de desencanto en la política pero usted tiene una historia política personal.

–He tenido una gran trayectoria en el gremio, en política hace mucho tiempo que no participamos. Yo recién ahora participo con este partido, que tenemos hace mucho tiempo pero yo nunca fui candidato. Pero esta vez me dijeron los muchachos “tenés que ir vos de candidato a intendente” y así fue.

–También una historia de militancia en el peronismo…

–Vengo de una extracción peronista. Soy peronista.

–También dijo que el PUL era una parte del peronismo pero no todo. ¿En cuál parte del peronismo se siente representado?

–En el legítimo peronismo. Acá hay peronismo de izquierda, de derecha, yo soy peronista de Perón, con las 20 verdades, con la doctrina. Los demás se han ido a la izquierda o a la derecha, Perón era de centro y yo sigo la misma línea que el general y de Eva Perón.

–Ha recibido felicitaciones de distintos referentes del PJ ¿Con cuál de los dirigentes del peronismo rionegrino se siente mas identificado?

–Acá es un nido de lauchas, todos se creen que tienen el bastón de mariscal, todos son cacique, ninguno quiere trabajar en la militancia, todos se acomodan hasta con el diablo con tal de quedarse. No me identifico con ninguno. Yo voy a hacer un gobierno plural, con la gente, con el vecino. Voy a hacer un gobierno excelente porque voy a estar con el pueblo. Ese es el mandato que tengo.

–Tuvo una muy buena relación con la gobernadora Carreras ¿Qué fue lo que los distanció?

–Nada, ella armó su lista, nunca me dijo que si quería participar. Le dije ‘mirá Arabela, yo voy a armar mi lista y a presentarme’. Habrá evaluado que e iba a sacar pocos votos y me dijo ‘dale Walter, si nosotros tenemos buena onda’. Y largué con el PUL. A nosotros también nos sorprendió haber ganado. Nosotros decíamos que íbamos a ganar, para que la tropa se mueva, pero nos sorprendió ganarle a la gobernadora.

–Hizo una muy buena elección en los barrios de la periferia de Bariloche ¿Por qué cree que lo votaron más ahí que en ningún otro lado?

–Porque nosotros estamos con la gente de El Alto, vivimos con ellos, sabemos su situación, la pobreza, las calles, falta de oportunidades. Y la gente vio en mi que podía ser el candidato de ellos y me votó. Y eso que tuvimos una campaña en contra a morir, llevaron chapas, frazadas, colchones, plata, de todo. El último día era un acarreo impresionante. Igual le ganamos. La gente recibió lo que tenía que recibir y nos votó a nosotros.

–También sabe que es el intendente electo con menos caudal de votos en la historia de Bariloche ¿Qué piensa sobre eso?

–A mi me gustaron siempre los desafíos. Me tocó bailar con la más fea, tendré que bailar con la más fea. No hay ningún problema, a mi no me dieron la mejor. Pero es un gran desafío porque en los próximos cuatro años le voy a tapar la boca a unos cuantos que pensaban que yo no iba a hacer una buena agestión. Ya me estoy moviendo, antes de irme de mi mandato voy a entregar dos mil y tres mil terrenos y la gente va a tener su casita ahí, ya estoy comprando una planta de asfalto, buscando una cantera para empezar a traer ripio y arreglar las calles. Voy a hacer una gestión maravillosa. Son un hombre de palabra. Si no para que voy a ir a la intendencia, yo no voy en busca de plata, con el sueldo que tengo está bien me quedo en el gremio y nada más. No soy un busca de la política, ni hacer negocios ni nada por el estilo.

–Habrá un Consejo Deliberante muy dividido ¿Considera que acompañará sus propuestas?

–Si ellos no me acompañan van tener que vérsela con el pueblo. Pero van a acompañar, es gente buena, la mayoría son casi todos peronistas.

–Estuvo preso por una denuncia por defraudación el Estado…

–Fue todo muy vapuleado en una época, por los jueces, estuvo (Martín) Soria metido en eso. Una causa inventada, después de 20 años me condenan. El último día que iba a caer la causa nos citan para declarar. Fue toda una maniobra donde estuvo la política metida y nos termina sobreseyendo la Corte, y nos declara inocentes de toda esa situación.

–¿Cuál era el motivo?

 

–A nosotros nos había dado un dinero para el policlínico Arbos (de una asociación regional de Obras Sociales) y nosotros le pagamos los sueldos a la gente porque la gente nos tocaba los bombos. Ahí empezaron a decir que había estafa, malversación. Demostramos todo como habíamos gastado y aun así siguieron para adelante en Casación nos cambiaron los jueces que no nos recibieron la apelación y tuvimos que ir en queja ante la Corte. Por eso estuvimos detenidos un año y medio. Todo muy mal intencionado y una situación horrible para nosotros.