Es puro autoritarismo, crecería sin límites el poder del empleador

Por Mario Almirón

Los Convenios colectivos son la forma más democrática de repartir derechos y obligaciones en el mundo del trabajo. La participación de los trabajadores mediante su Sindicato, los empleadores y el Estado, garantiza que este instrumento reconozca los intereses y derechos de las partes.

Los Convenios colectivos son la forma más democrática de repartir derechos y obligaciones en el mundo del trabajo. La participación de los trabajadores mediante su Sindicato, los empleadores y el Estado, garantiza que este instrumento reconozca los intereses y derechos de las partes. Si no existieran, como propone Méndez ( y alguna dirigencia política y empresarial), crecería sin límites el poder unilateral del empleador, quien decidiría todas aquellas cuestiones que, por su generalidad, no están previstas en las leyes o que se des/actualizan por el paso del tiempo y la dinámica de la realidad.

Más aún, si no hubiera paritarias, el Estado dejaría de cumplir un rol importante que tiene en la negociación colectiva: controlar la legalidad de los acuerdos pactados entre empleador y trabajadores, para que no impliquen niveles de protección menores a la normativa laboral. Los convenios colectivos comprenden una serie bien amplia de materias: las Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo (CyMAT). Entre ellas, cabe destacar las siguientes: Clasificación profesional; estabilidad en el empleo; carga de trabajo; ambiente de Trabajo; Seguridad y salubridad laboral; adecuación ergonómica; repercusiones teconológicas; igualdad de Trato y No discriminación; Representación sindical en la empresa; Tiempo de trabajo y descanso; régimen de licencias y remuneraciones.

Reducir -como pretende Méndez- la negociación colectiva a un mecanismo de “fijación de salarios” es desconocer nuestra historia y presente. Pretender que se congele la discusión salarial es puro autoritarismo. La luchas sindicales siempre han tenido un horizonte más amplio. Se acerca el 1ro. de mayo, día del trabajo y de Los Trabajadores. La fecha recuerda la lucha obrera por la jornadade 8 horas: conmemora la sangrienta represión a las huelgas de los obreros en los EE UU para conseguir que se limite la jornada laboral.

El país sin paritarias con el que sueña Méndez, es un país que violentaría la Constitución porque el artículo 14 bis reconoce el derecho.

El país sin paritarias y sin vigencia de la Constitución ni respeto de los derechos existió, pero el conjunto de la sociedad no quiere volver a él. Y los trabajadores que hemos conquistado las paritarias en estos años estamos dispuestos a luchar para defenderlas.

INFONEWS

A %d blogueros les gusta esto: