La protesta continúa.
El flamante jefe de la Gendarmería, Enrique Zach, ingresó anoche, apenas pasadas las 23, al edificio Guardacostas, donde se reunió con su par de la Prefectura, Luis Heiler, con el objetivo de continuar la negociación que destrabe el conflicto salarial de los efectivos.
Luego de la generalización de la protesta de las fuerzas de seguridad y de la renovación de las cúpulas de prefectura y gendarmería, continúa el reclamo salarial frente al edificio Centinela y edificio Guardacostas en Puerto Madero.
“Queremos una reunión con gente del ministerio, con la ministra Garré o con el secretario (Sergio Berni)”, afirmaron los gendarmes al terminar la reunión que llevaban a cabo con el nuevo director del área Enrique Zach. Al respecto, señalaron que “la medida va a continuar hasta que no tengamos un escrito del ministerio aceptando nuestros reclamos” y remarcaron que “esto es un granito de arena de la montaña que se puede hacer dentro de diez, quince días cuando no tengamos solución a nuestros reclamos”.
En tanto, el nuevo director de Prefectura, Luis Alberto Heiler, se encontraba en el dificio Guardacostas reunido con los prefectos.
Durante la madrugada, el vocero de Prefectura anunció un preacuerdo que contemplaba tres puntos: la fijación de un piso salarial de 7000 pesos de bolsillo, la creación de una comisión negociadora, y la garantía de que no se sancionaría administrativamente a los agentes que realizan la medida fuerza.
Ese acuerdo, que fue también apoyado por los gendarmes, se sellaría con “la firma” del secretario de Seguridad, Sergio Berni. Sin embargo, pasadas las 5.30, el mismo vocero afirmó que el Ministerio de Seguridad sólo se comprometía a “analizar” el petitorio y depositar las sumas mal liquidadas entre hoy y el viernes, con lo que justificó el mantenimiento de la concentración de los efectivos, a la espera de una respuesta definitiva que, siempre siguiendo al mismo vocero, llegaría recién el martes.
