“Las calificadoras son el origen” de la crisis económica global

El ministro de Economía, Amado Boudou, cuestionó a las calificadoras de riesgo al considerar que “son el origen y el mecanismo de transmisión” de la crisis financiera internacional, al tiempo que criticó la falta de regulación de los productos derivados y financieros.

Para Boudou, las calificadoras “no son profesionales ni transparentes, sino que son el `fronting` (frente) de cuestiones políticas que esconden objetivos de grupos económicos concentrados”.

El ministro realizó estas precisiones, al participar de un seminario organizado por la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) en el Hotel Intercontinental.

Boudou consideró que “a las calificadoras les caben el rol de la asignación del ahorro de estos últimos años; son ellas a través de sus notas las que dirigían los flujos de capitales, con lo que no pueden mirar hacia el costado” en estos momentos de crisis.

“Cuando uno mira a las calificadoras de riesgo y las notas que ponen a países con situaciones macroeconómicas sólidas como la Argentina, y las notas a algunos países de Europa, que lamentablemente padecen una crisis de deuda fenomenal, queda claro que ahí hay algo más que racionalidad, transparencia y análisis técnico”, dijo el funcionario.

Boudou llamó a “desafiar la lógica del Consenso de Washington” de promover el funcionamiento de los mercados financieros sin Estado, e instó a replantear el rol de las calificadoras y el de los mercados de derivados y futuros.

“Es imposible pensar que la riqueza de los pueblos y naciones pueda estar sostenida por la dinámica de papeles. La misma sólo es sostenida en la creación de valor, puestos de trabajo, de productos de la economía real y no en ese verdadero castillo de naipes que son los mercados de futuros y los derivados”, enfatizó.

“Quedó demostrado hoy que el sistema financiero no puede funcionar sin la presencia del Estado”, agregó el ministro.

Por su parte, el titular de la Anses, Diego Bossio, ponderó la acción del Estado argentino en lograr que el Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) alcance hoy cerca de 200.000 millones de pesos.

Esto significa, dijo Bossio, “un crecimiento de 70% del fondo en sólo dos años, apostando a decisiones de la economía real y que nada tenían que ver con las calificadoras de riesgo”.

“No necesariamente las notas de las tres calificadoras más importantes son las más seguras, y garanticen que se puedan recobrar los préstamos”, dijo el funcionario al recordar el “éxito” del préstamo otorgado por la Anses a la automotriz General Motors en plena crisis del 2009, cuya evaluación crediticia quedó fuera de la órbita de las calificadoras.

Respecto de la acción del Estado y la decisión de volver al sistema de reparto en la Argentina, Bossio destacó además el ahorro que lograron los argentinos al haber cambiado el sistema que antes administraban las AFJP.

“Las AFJP cobrarían hoy 354 millones de pesos, casi 100 veces más les salía a los argentinos, que lo que hoy le cuesta al Estado”, precisó.

Del seminario también tomaron parte el profesor de Economía Estatal de la London School of Economics, Nicolas Barr; el especialista de Naciones Unidas, Sergio Arvizú; el titular del fondo de Pensiones de Japón, Takahiro Mitani, y el administrador del Fondo de Garantía de sustentabilidad argentino, Santiago López
Alfaro.

FUENTE:TELAM

A %d blogueros les gusta esto: