Porno selfie: la tendencia más hot de la autofoto

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NOTA DE INFONEWS

La autofoto sacada con celular se sumó a la pornocultura. Comunidades en Facebook y páginas de internet publican fotos de chicas y chicas que se muestran desnudos o teniendo sexo.

Al selfie lo impusieron los famosos: hacerse un autorretrato con el celular y subirlo a las redes sociales. Rápidamente se convirtió en una moda mundial y millones de personas por día lo llevan a cabo.

 

Este modo de exhibirse ha llevado a muchos cibernautas a dar un paso más y tomarse fotos sin ropa o en situaciones sexuales (solos o acompañados) para compartirlas en comunidades de Facebook como Selfie Porno +18 o subirlas a páginas como pornoselfie.com, el estadio más subido de tono de esta moda.

 

El selfie porno se ha convertido en una arista más de pornocultura del siglo XXI. Hechos para compartirse buscan provocar y seducción. El selfie, una vez posteado se vuelve imperecedero y casi imposible de eliminar.

 

Muchas veces, cuando son más de dos personas, es común que alguien sienta remordimientos por haberse expuesto y luego le preocupe que esas imágenes regresen a destruir su posición social.

 

“Este tipo de exhibición nos habla de una nueva tendencia social a la que se denomina extimidad: la voluntad de hacer pública la intimidad o el placer de ser visto por desconocidos incluso en los momentos más privados”, le explica a INFOnews la psicóloga Graciela Federicci.

 

El acto sexual pasa a segundo plano al convertir a cualquiera en involuntaria estrella porno.

 

La especialista dice que “las redes sociales han cambiado la forma de cómo mucha gente quiere ser percibida por los demás. Para ellos se hace necesario mostrarse cada vez más, es superfluo porque todo se basa en la imagen más que en el valor de una persona. De algún modo esto hace que las relaciones sean más light, basadas en la imagen”.

El selfie porno puede ser un acto de atrevimiento para muchos, una prueba de amor o un acto irreflexivo e irresponsable sin considerar las consecuencias que pueden derivar en chantaje, extorsión o destrucción moral en manos extrañas.

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