Se trata de “Rumbo Delta”, conformada por una decena de lanchas taxi. Les cortaron la luz y los trasladaron al final de la estación fluvial, luego de que un concejal del FpV les gestionara la matrícula provincial.
Según consignó Tiempo Argentino, trabajadores de la cooperativa de lanchas taxi Rumbo Delta, de Tigre, acusaron al massismo de persecución política: denunciaron que, tras haber recibido el registro provincial para ejercer la actividad como cooperativa, gestionado por el concejal y precandidato a intendente por el Frente para la Victoria, Federico Ugo, les cortaron la luz y luego les quitaron el puesto donde ofrecían sus servicios, sobre la estación fluvial. Ahora –afirman– peligra la fuente laboral de diez familias que históricamente se dedicaron a esa actividad.
Hasta hace dos años, la decena de lancheros desempeñaba sus funciones de forma individual, “dispersa”, según definió a Tiempo Carlos Trovato, uno de los damnificados, que trabaja con dos lanchas desde 2006. Otros, como Héctor Marsili, hijo y nieto de lancheros, están hace 40 años. Fue entonces –relata Trovato– que el municipio, a cargo de Julio Zamora, les sugirió que se establecieran en cooperativa para que, agrupados, tuvieran un stand fijo en un lugar céntrico de la estación fluvial. Los lancheros lo hicieron, y consiguieron la matrícula provincial (ahora aguardan la nacional) con la gestión de Ugo, con quien se tomaron una foto. Eso fue hace dos meses. Un par de años antes habían logrado tener el stand provisorio en el sitio acordado de la estación fluvial, transformándose en las únicas lanchas habilitadas como taxis de esa zona. “A partir de la foto con el concejal explotó todo”, apunta Trovato. “Primero nos cortaron la luz durante 20 días, y el jueves nos dijeron que nos trasladaban a otro stand a cien metros de donde tenemos las lanchas. Es al final de la estación. Ahí no podemos mostrarnos, no pasan turistas, y a los que pasen no les podemos decir que nos acompañen cien metros hasta donde están las lanchas para que vean el servicio. No nos sirve. Ya tuvimos que decirle a nuestra empleada y a dos muchachos que venían con sus lanchas que no vengan más.”
El apuntado es el director municipal de la estación, Juan Grillone, que –según denunciaron– les dijo: “En 30 días los rajamos de acá.” El viernes pasado les quitaron la garita, durante la madrugada. En el último contacto con el municipio les aseguraron que hoy tendrán una reunión para pactar un permiso de obra de construcción del stand en una mejor zona. Hoy deambulan los lancheros, casi sin trabajo, ofreciendo los servicios en la calle. Y siguen sin recibir la habilitación municipal definitiva, a pesar de que pagan la tasa de seguridad e higiene, como los otros comercios: 650 pesos mensuales por embarcación.
“Nosotros acompañamos a la cooperativa porque consideramos que es una fuente de trabajo que durante años sufrió la ausencia del estado municipal, y como tal nos hicimos presentes, pero ahora resulta que recibieron una represalia por ello. Es insólito”, manifestó Ugo. “Cuando habían conseguido avanzar, le quitan esos beneficios por meras diferencias de banderías políticas.”
700 docentes con sueldos adeudados
Unos 300 docentes de Tigre mantienen “tomada” la Jefatura Regional de Educación VI de la provincia de Buenos Aires, ubicada en avenida Libertador General San Martín 455, en ese partido del norte del Gran Buenos Aires, en reclamo por sueldos adeudados de la Dirección General de Escuelas bonaerense. Según contó el secretario general SUTEBA Tigre, Alfredo Cáceres, “son 700 los docentes afectados, un promedio de tres a cuatro por escuela”. Ayer realizaron un festival junto con otros docentes y organizaciones de zona norte. Y hoy, tras una conferencia de prensa, harán una nueva asamblea para discutir si levantan el paro y la toma. Reclamaron un pago “de inmediato de todos los sueldos
