Seguridad vial: la importancia de la distancia de frenado
El 19º Distrito – Bahía Blanca de la Dirección Nacional de Vialidad (D. N. V.), dependiente de la Secretaria de Obras Públicas, Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios, informa acerca de un tema relacionado a la seguridad vial en rutas, la importancia de la distancia preventiva de frenado
A la hora de circular por las rutas existen muchas situaciones que debemos tener en cuenta. Una de ellas es la distancia de frenado entre nuestro vehículo y los demás usuarios de la ruta
Organismos nacionales como el Observatorio del Isev, Luchemos por la Vida, Seguridad Vial de la Nación y el Cesvi, entre otros, indican que más del 30% de los siniestros viales, son los denominados “por alcance”, comúnmente llamado choque de atrás.
Esta situación se debe a varios factores, entre ellos la visibilidad, la distracción del conductor, la incorrecta distancia de seguridad entre vehículos, o el mal uso del freno, entre las causas más comunes.
Por todo eso, es que se hace imprescindible conocer algunos datos acerca de la denominada “Distancia de frenado” es el trayecto que recorre un vehículo desde que el conductor se percata de la presencia de un obstáculo en el camino, hasta que se detiene completamente.
Ese tiempo en una persona totalmente concentrada en el manejo y enfocada en el camino, es de ¾ de segundo a un segundo. Es por eso que es tan importante evitar situaciones de distracción o estado físicos alterados, como cansancio, malestar, alcohol o drogas.
A modo de ejemplo, si hablamos por teléfono o enviamos mensajes de texto tardamos 6 segundos en reaccionar y accionar el freno, esto equivale a circular más de 100 metros a ciegas en la ruta. Cuando manipulamos el estéreo del vehículo, se utilizan 3 segundos, algo más de 70 metros recorridos, y cuando encendemos un cigarrillo lo hacemos en 2 segundos y 50 metros de distancia.
En la distancia de frenado se conjugan varios factores además del tiempo: La velocidad, el peso del vehículo (incluida la carga), las condiciones mecánicas (sobre todo el sistema de frenos, los amortiguadores y los neumáticos) y la adherencia, siendo que es totalmente distinto frenar en piso seco, que húmedo o mojado.
En caso de condiciones climáticas de lluvia, se tienen que tener en cuenta otros factores para evitar siniestros ya que la distancia de frenado debe ser mayor. Frente a un piso mojado se debe evitar el “hidroplaneo” – el vehículo no se adhiere a la calzada por el agua, situación que es peligrosa ya que se pierde estabilidad y control del automóvil-, utilizar el desempañador de los vidrios el limpiaparabrisas para mejorar la visibilidad dentro del vehículo y mantener la tracción –no frenar o cambiar de dirección repentinamente-.
Cabe destacar otro concepto que es la distancia de seguridad, se trata de la distancia que hay que dejar con el vehículo que nos precede. En general se habla de 3 o 4 segundos dependiendo de la velocidad con la que se circula. Hay mucha diferencia entre frenar imprevistamente cuando se circula a 50 km/h, donde se recorren 14 metros por segundo, y otra es a 120 km/h, donde los metros son 33 por segundo. En horarios nocturnos, se recomienda extender por lo menos un 50% más, la distancia de seguridad. Para medir el tiempo, se toma una referencia fija del camino, como un puente, un cartel o una marca en el asfalto, y comenzar a contar, cuando la cola del vehículo que va adelante, pase por esa referencia.
Por todo esto, el 19º Distrito de la D.N.V. recomienda a los usuarios, respetar las normas de seguridad, circular con suma precaución, disminuir la velocidad, llevar las luces bajas encendidas y utilizar el cinturón de seguridad.
