Hoy se realizará una nueva audiencia por el juicio a los 17 imputados por el homicidio de Mariano Ferreyra, dirigente de la FUBA y militante del Partido Obrero que falleció de un disparo cuando acompañaba una movilización de trabajadores tercerizados y despedidos.
La sesión se reanudará con la declaración de nuevos testigos, luego de que la semana pasada tuviera lugar una serie de testimonios que golpearon duramente la hipótesis de la defensa. De acuerdo a los abogados de Pedraza y la Unión Ferroviaria, la muerte de Ferreyra habría sido producto de un enfrentamiento entre dos grupos antagónicos.
Sin embargo, la declaración de Maria Wenceslao Villalba primero, y la confirmación de un oficial de policía después, revelaron que se trató de un ataque violento por parte de la patota ferroviaria contra los tercerizados cuando estos se estaban retirando del lugar. Además, el uniformado confirmó que los patrulleros de la Bonaerense se movieron APRA dejar el camino libre a los atacantes.
De este modo, la teoría de la defensa sufrió un severo traspié durante las primeras audiencias del juicio al dejar sentado que hubo un ataque premeditado contra la protesta de los trabajadores. La querella, por su parte, irá ahora al intento por demostrar la autoría intelectual de Pedraza en el asesinato de Ferreyra, a partir de sus vínculos con las empresas que explotaban personal tercerizados.
